Cuba no deja de sorprender a todo aquel que la visita. Su historia, su cultura, la alegría y hospitalidad de su gente, sus paisajes de ensueño… son muchos los atractivos de la isla caribeña que invitan a viajar a Cuba y la convierten en un destino turístico muy especial que visitar.
Recorrer sus distintas provincias supone realizar un inolvidable paseo por el tiempo descubriendo ciudades que han sabido progresar manteniendo su esencia cubana y los vestigios de su pasado colonial. En Cuba tienes mucho que ver, empezando por la capital, La Habana, con el encanto de su casco antiguo, La Habana Vieja, puro color, sabor y son cubano y continuando por las distintas villas históricas que salpican el país. Pinar del Río, Santiago de Cuba, Cienfuegos… y por supuesto, Camagüey, uno de los tesoros que esconde la isla y que merece la pena descubrir.
Una ciudad tranquila y una naturaleza que impresiona
Camagüey es una de las provincias cubanas que más contrastes ofrece al visitante. Se encuentra a unos 500 kilómetros de la capital y es la tercera ciudad más poblada de la isla. Lo primero que llama la atención es la tranquilidad que se respira por las calles estrechas de su casco antiguo, declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. En un primer paseo, verás algunos de sus monumentos y lugares emblemáticos como la Catedral de Nuestra Señora de la Candelaria, la Plaza de San Juan, el Parque Ignacio Agramonte, el teatro Principal o la Plaza de los Trabajadores, siempre de lo más animada. Además, podrás disfrutar del ambiente pausado de Camagüey y de las mil sorpresas que guardan sus calles flanqueadas de casas de colores, palmeras, tascas y «tinajones» (antiguas tinajas que se utilizaban para recoger el agua y que hoy son un elemento arquitectónico y decorativo de la ciudad).
Playas y sierras
La provincia cuenta con más de 19 kilómetros de playas, por lo que, si buscas un paisaje paradisiaco de arenas blancas y aguas turquesas, este es tu sitio. Las Playas de Santa Lucía y las de Cayo Sabinal (Playa Bonita, Playa Brava) son un buen ejemplo de toda la belleza y de la luz del Caribe. En sus aguas, además, guardan con celo maravillas que harán las delicias de los amantes del submarinismo. Bajo el mar, la riqueza de la flora y fauna, con multitud de especies acuáticas y maravillosos corales como protagonistas, y la posibilidad de ver restos de antiguos naufragios, hacen que, aquí, el buceo resulte una experiencia única. Si dispones de tiempo no dejes de visitar Cayo Caguama, enclave favorito de las tortugas marinas.
Si eres más de «tierra adentro», Camagüey también tiene una sorpresa para ti. A escasos kilómetros de la ciudad se eleva la Sierra del Chorrillo, perfecta para descubrir el paisaje cubano menos conocido realizando alguna ruta de senderismo que te permita ver, como nunca, distintas especies de aves, árboles que solo aquí se dan e incluso caballos autóctonos que viven en las granjas ubicadas en la sierra.
Como ves, Camagüey lo tiene todo para ser tu próximo destino en Cuba.